ETAPA 7
CIUDAD DE IQUITOS
Con la gran incógnita de saber cómo sería, llegamos a la ciudad de Iquitos, llamada la Capital de la Amazonía Peruana. Ciudad de más de 400.000 habitantes y rodeada totalmente por agua. La única manera de llegar es por aire o navegando como lo hicimos nosotros. Desembarcamos en el puerto de Nanay, sobre el Rio Itaya, en el Mercado de Productores. La primera vista es muy pintoresca, ya que hay infinidad de barquitos, lanchas, botes amarrados a la orilla, un hormiguero de gente y las construcciones totalmente de madera. El nivel del agua es muy bajo por lo que debemos caminar por una rampa estrecha hasta llegar a tierra firme donde están las primeras construcciones. Nos ayudan a trepar con las valijas. Vemos una impresionante cantidad de mugre, basura de todo tipo sobre lo que sería el fondo del río. Un poco peor que algunos lugares de nuestro país.
Ya en la calle nos encontramos con infinidad de moto-taxis aguardando a algún pasajero. Esto, pasaría a ser común en los días que vivimos en esta ciudad. Este medio de transporte es el más utilizado, por lo práctico, la gran cantidad de móviles, la rapidez, y económico. Casi no se ven autos particulares. Hay viejos colectivos con carrocería de madera que cuando uno los ve, trata de hacerse a un lado rápidamente por temor a ser atropellados. A cualquier lugar a donde vaya y en cualquier horario, sin perder tiempo, encontrara muchos de estos moto-taxis disponibles. Me llamó la atención que por más de ser turistas nadie trato de estafarnos como estamos acostumbrados en Argentina cuando tomamos un taxi en una ciudad que no conocemos.
Nos dirigimos rápidamente a la casa de Laly y Jaker, quienes nos alojarían en su hogar por algunos días a través de couchsurfing. Nos encontramos allí con dos personas más o menos de nuestra edad, muy cordiales, generosos, con muchas ganas de conversar y acostumbrados a recibir turistas de todo el mundo. Nos ofrecen una habitación con baño privado que ya no usan donde nos instalamos rápidamente. Una perrita, Manchas, una de las mascotas de la casa, nos adopta enseguida, se ubica debajo de la cama y nos acompaña a todos lados.
Al día siguiente comenzamos nuestra visita a una serie de lugares de interés que habíamos planeado previamente.
Vamos a visitar la Reserva Natural de Allpahuayo- Mishana que se encuentra ubicada sobre la ruta a la ciudad de Nauta. Primero tomamos un moto-taxi que por 3 soles nos lleva hasta una esquina de la ciudad desde donde parten unas pequeñas combis hacia esa ciudad. Nos llevan como sardinas enlatadas. Llegamos al parque recién abriendo las puertas. Como todavía no está el guía nos explican rápidamente el camino a hacer y partimos solos en un trekking de 5 horas. Caminamos por una selva virgen con algunos ambientes muy exclusivos llamados Varillares que son muy importantes para la economía de los habitantes de la región ya que estos pueden producir madera para múltiples usos. Vemos y oímos infinidad de diferentes aves. Al regresar, nos sentamos a descansar y tenemos la oportunidad de conversar con uno de los investigadores que está estudiando todo este ecosistema.
Seguimos camino haciendo “dedo” en la ruta. Nos recogió un transporte local que nos llevo hasta el Refugio y Centro de Rescate de Manatíes. Esta organización trabaja en la reproducción de algunas especies de tortugas y en el rescate de las “vacas de agua”. Estos manatíes, mamíferos vegetarianos, que una vez curados y bien alimentados son liberados en lagunas no contaminadas perteneciente a alguna reserva o parques nacional.

NOVATEK CAMERA
Podemos acercarnos, tocar la piel muy suave que tienen y alimentarlos con su bocado preferido. Luego vemos como los alimentan a mamadera cada 2 horas como un bebé.
Muy cerca de allí está el Complejo de Quistococha. Es un complejo municipal donde hay una playa artificial alrededor de una laguna donde está permitido bañarse y un zoológico donde pueden verse animales de la región. Hay partes que están en malas condiciones pero en general se ve un buen mantenimiento y animales bien alimentados. Es muy visitado por la gente de la ciudad, especialmente los fines de semana.
Llegando la tardecita, cansados del derrotero retornamos a la ciudad en un moto-taxi que nos deja en la puerta de nuestro alojamiento.
Fin del Capítulo 7
Próxima etapa:
Visita a la ciudad y al Parque Nacional Pacaya Samiria